Yo todavía me acuerdo sin ningún bache en nuestra historia cómo fue que te conocí. En qué contexto te conocí. La inmediata conexión que yo supe existente por el chispazo de tus ojos entrecerrados. La noción mutua de sabernos excepciones de las casualidades. Porque el momento, el punto, el últimatum de encuentros colmó ahí, entre el segundo en el que se escucha una verdad y el segundo en el que se asimila.

"Me pasé la vida imaginándote"

Yo todavía me acuerdo de haberte visto luchar para agarrar las estrellas y el brillo. Muchas veces pasar a letargos ausentes en los que te extrañé de verdad. Y recuerdo que estaba con vos el día en el que ya no ibas a estar tan cerca. Te vi marcharte con la vida, y con los flashes y con las noticias del martes a las 7 am mientras me tomaba el café. Y sigo tratando de mantener tu ritmo pero te vas deshaciendo, y cada vez que la situación no amerita menos que un abrazo te dejé de sentir. 

Quiero verte ser, mi sueño sos vos.






Comentarios

Entradas populares de este blog

Argia.

Son horas.